Scilla, que no Sicilia, es un pequeño municipio de Italia perteneciente a la región de Reggio Calabria. La gente las confunde dado que se escriben de forma parecida. Cuenta con tan solo 5200 habitantes. Es conocida por los italianos como: "La Venezia del Sur". Se encuentra justo en la "puntita" de la bota y enfrente de Sicilia, aquí:
Es un pueblecito precioso que os recomiendo visitar, con un día es suficiente para verlo. Pero puede que os enamore y quedraís pasar más tiempo :)
COMO LLEGAR :
* Por avión: Puedes coger un avión desde España a Reggio Calabria (Advierto de que no hay vuelos directos, siempre habrá que hacer una escala) es más caro pero siempre es una opción. Desde el aeropuerto de Reggio Calabria al centro de la ciudad salen autobuses por el precio de 2 euros o taxi por 20 euros (Tarifa fija) se tarda unos 15- 20 minutos. Una vez en el centro, debes coger el tren que te lleva hasta Scilla por el módico precio de 2,40 euros y tarda 30 minutos.
Otra opción es desde España a Sicilia (Ay Sicilia que ganitas te tenemos...) hay vuelos bastante económicos, y coger el barco.
*Por barco: Si os situáis en el mapa que he dejado arriba, en MESINA (Sicilia) puedes coger un barco que te lleva o bien a REGGIO CALABRIA o a VILLA DE SAN GIOVANI. Para Reggio Calabria tendríais que hacer lo anteriormente mencionado y para Villa de San Giovani, también tendríais que coger el tren, pero solo os llevará una parada, 5 minutos. Aunque en verano puede que haya algunos barcos que os lleven directamente. El barco tiene un trayecto de 40 minutos y cuesta 5 euros ida y vuelta. Económico eh??
QUE VER:
Scilla se divide en dos partes: La Nueva, que es dónde se encuentra la playa donde te puedes bañar.
Y la parte Antigua, dónde llegan las barcas a las puertas de las propias casas.
El tren te deja en la parte nueva y para pasar a la parte antigua hay que pasar el túnel que hay justo debajo del castillo o callejear por la parte de detrás de la playa. A parte de ver las dos partes del pueblo, os recomiendo:
Pasar por el "Túnel": Es muy curioso ver la sala de espera de la estación marítima. En invierno muchas de las veces se hinunda y es imposible pasar de un lado al otro.
Visitar el castillo: El castillo es el símbolo de Scilla. La entrada solo cuesta 2 euros. Dentro se realizan conciertos, actuaciones... Tiene la mejor panorámica del pueblo pero solo está abierto a partir de primavera, por lo que me quedé sin la foto :8 (Pero me da igual, sé que voy a volver Jeje) También dentro del castillo hay un pequeño museo (Para mi gusto un poco anticuado, creo que podrían sacarle más partido) y un faro muy mono.
La Iglesia: No es nada del otro mundo, pero he de decir que me sorprendió el GRANDIOSO mosaico del altar. A parte del contraste que produce al ser tan colorido con los muros tan blancos que llenan la iglesia.
Y por supuesto no puede faltar .... PERDERSE POR SUS CALLES, es una presciosidad de pueblo y callejear es la esencia.
DONDE COMER:
En la época del otoño y del invierno los sitios para comer corresponden al centro de la ciudad, que no son ninguna de las partes que os he enseñado. En la parte "moderna" (la parte de la playa) no hay ningún sitio dónde comer, está todo bien cerradito, y en la parte antigua podéis encontrar algún que otro restaurante abierto. Los dos restaurantes que me aconsejó el barman de mi hotel (Gracias a él fuí y descubrí este sitio. Mientras el pobre Giaco iba a trabajar, yo charlaba en el desayuno con el barman que me aconsejó de ir y me enseñó todo sobre este puesto) son:
- Il Principe di Scilla
-Bleu De Toi
Yo comí en este último. Calidad/precio medio-alto para los españoles, para los italianos es un precio bastante aceptable, es un precio normal XD. Os lo recomiendo, Merece la pena ;)
Como yo hablo con todo el mundo y el silencio no es mi fuerte, estuve hablando con el camarero del restaurante que me contó que: En verano, en la parte antigua , todos los restaurantes que están en la orilla del mar ponen una plataforma . Así puedes comer encima del agua, y que los pescadores llegan a esta plataforma a vender al restaurante el pescado fresco. Guayyyy eh??? Que te sientes a comer y venga el pescador, mientras tú decides que langosta te gusta más para comer XD. Esta es otra de las razones por las que quiero regresar.
En invierno este restaurante tiene una especie de taberna muy "mona" con puertas cristaleras que dan al mar. En invierno, si hay un día de oleaje fuerte, puedes ver como las olas golpean la puerta mientras comes.
Las puertas están pegadas al mar, por ese motivo están hechas de forma especial, con un material que permite que el agua no entre en las casas y que resiste a la sal para que no "fastidie" el color de esta.
POR ULTIMO SOLO PUEDO ANIMAROS A VISITAR ESTE PUEBLECITO, NO OS ARREPENTIREIS :) OS VEO EN EL SIGUIENTE POST ;)
